viernes, 4 de agosto de 2017

Capitalismo y salud

Ángeles Maestro estuvo también en la Semana de Filosofía que cada año organiza en Pontevedra el Aula Castelao. Este año se desarrolló bajo el lema Filosofía y Salud.

Este es el resumen que hace la propia Aula de su conferencia (los subrayados, como es habitual, son míos):
  • El capitalismo, por sí mismo, con independencia de sus formas de existencia concretas ("Estado del bienestar", neoliberalismo, etc.) no sólo se apropia de la riqueza producida por la clase obrera; la imposición lógica de la obtención de beneficios por arriba de cualquiera otro objetivo -como la salud o la vida misma de la población- explica fenómenos tan crueles como el expolio de otros pueblos mediante las guerras u otros menos visibles como las desigualdades sociales.
  • El coste pagado por la clase obrera es el menoscabo de su vida, expresado  -en lo que al estricto ámbito de la salud se refiere- en una mayor mortalidad prematura, el impacto de enfermedades evitables o lo que se conoce como enfermedad mental, permite definir más que nunca el capitalismo del siglo XXI como la barbarie o como la prehistoria de la humanidad.
  • La crisis general del capitalismo, de la que el último episodio fue la explosión de las burbujas financiera e inmobiliaria, determina la intensificación de formas de acumulación de capital basadas en drásticos incrementos de la tasa de explotación y en la privatización de empresas y servicios públicos, especialmente en los países del llamado primer mundo.
  • Ambos aspectos son impuestos a los diversos gobiernos de la Unión Europea -con independencia de su color político- por medio de las formas de dominación hegemónicas que son el Banco Central Europeo, el FMI y la propia Zona Euro.
  • Las diferentes formas de gestión privada, financiadas con dinero público, van invadiendo progresivamente los servicios sanitarios. Los recortes en recursos de la sanidad pública responden al objetivo de permitir el avance del capital privado y, por tanto, a la necesidad de reducir la calidad asistencial en la sanidad pública. La consecuencia, unida a un aumento del gasto público destinado a asegurar los beneficios empresariales, es un empeoramiento global (público y privado) de los resultados medidos en impacto sobre la salud.
  • Concluimos con la afirmación de la necesidad apremiante de desarrollar formas de organización y poder popular construidas sobre la independencia de formaciones políticas institucionales que, como la experiencia ha demostrado, terminan por someterse -mediante chantajes o sobornos- a las exigencias del capital.




1 comentario:

  1. Tenemos dos extraordinarios ángeles en este país: Ángeles Maestro y Ángeles Diez.

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